“La pasión de Cristo” (2004), la película dirigida por Mel Gibson y protagonizada por Jim Caviezel, es la apariencia terrorífica de Satanás y hasta de su bebé diabólico. Miles de espectadores quedaron traumados y sufrieron pesadillas por el retrato en el filme.
En esta adaptación cinematográfica, Lucifer fue interpretado por una mujer, precisamente la actriz italiana Rosalinda Celentano. Su “bebé demonio”, en tanto, fue encarnado por Davide Marotta, que tiene enanismo (1,15 m de altura).